Blog Patron Seguro| Protegete de demandas laborales en tu hogar

En el día de las trabajadoras del hogar, conoce como las reformas a las Leyes (LTF y LSS) te afectan como patrón (término que usa la LFT para el jef@ del hogar).

La pandemia orilló a los patrones del hogar a no permitir la entrada de sus trabajadoras del hogar por cuestiones de seguridad, lo cual llevo a que 1 de cada 3 esté desempleada. Aunque se utilizó el término “descansar” en la realidad ante la Ley se incurrió en despido injustificado, (aunque a ninguna de las dos partes les conviniera lo cual aumentó las probabilidades de riesgos de demanda y conflictos laborales. Con los cambios en las leyes y los apoyo legales y capacitaciones del sindicato y otras organizaciones, la probabilidad de demandas aumentó, más debido al desconocimiento de las obligaciones patronales que tienen los empleadores.

¿Cómo empezó todo?

Tras siglos de invisibilización del trabajo doméstico, en 2018 una mujer tras laborar 57 años en una familia fue despedida sin haber tenido ninguna prestación laboral. El caso llegó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación quien reconoce discriminación sistemática y estructural hacia las trabajadoras del hogar, declara inconstitucional que su acceso a la seguridad social sea voluntario en vez de obligatorio. Por primera vez en la historia, la SCJN le ordena al IMSS (una instancia del gobierno federal) a realizar un Programa Piloto para el otorgamiento de seguridad social a las trabajadoras del hogar. Dicha Prueba Piloto para afiliarlas al IMSS es hoy una realidad.

¿Cómo se legisló?

Se han hecho reformas tanto a la Ley Federal del Trabajo como a la Ley del Seguro Social. En 2018 se reformó la Ley Federal del Trabajo incluyendo en el Capítulo XIII los derechos laborales de las Personas Trabajadoras del Hogar. En dicho Capítulo, se estipulan horarios, prestaciones, obligaciones de los patrones como contrato, afiliación al IMSS, capacitación, entre otros derechos laborales. La Ley del IMSS tambien tuvo cambios trascendentes pues pasaron de ser sujetos voluntarios de aseguramiento a ser del régimen obligatorio. (Art, 12-13 LSS) y en los anexos se estipularon los tiempos y procedimientos para su cumplimiento. Sin embargo, hay gran desconocimiento sobre el asunto o bien una clara intención de no cumplir la Ley (lo cual en nuestro país no suena descabellado).

Situación Actual

El incumplimiento es evidente. 98.3% de las mujeres trabajadoras del hogar no cuenta con acceso a servicios de salud, el 99.2% no cuenta con un contrato ¹ y solamente 12% cuenta con alguna prestación laboral: aguinaldo, vacaciones o seguro médico ² . 48% de las trabajadoras del hogar afirmó que la falta de prestaciones laborales era su principal problema. Así, ser trabajadora del hogar en nuestro país sigue implicando tener extensas jornadas de trabajo, sin tener cobertura de seguridad social e incumplimiento de normas laborales.

Para ejemplificar sus circunstancias aquí algunos datos:

42.9% tiene entre tres y cinco hijos.
35.9% son jefas de familia.
59% tiene entre 40 y 59 años de edad.
El promedio de edad es mayor en el caso de la Ciudad de México: 46.5 años vs. 42.5 años a nivel nacional.
50.7% de los hogares al que pertenecen las trabajadoras del hogar son pobres, en forma moderada o extrema.
12.6% de sus hogares están expuestos a inseguridad alimentaria grave.
Sólo 10.6% están fuera de la línea de pobreza y vulnerabilidad. ³

Particularidades del Mercado Laboral

En su mayoría los patrones del hogar están acostumbrados a pagar poco por el servicio, a no tener obligaciones patronales más que pagar su salario diario y a una amplia flexibilidad en horarios, vacaciones, aguinaldo, básicamente la relación laboral está determinada por las necesidades del patrón. La realidad es que en un mercado laboral donde el promedio nacional de ingreso es de $29.53 por hora o $3,294.95 mensuales y donde 34% recibe un salario mínimo y otras no reciben pago, nos habla de un mercado laboral con casos de abuso por parte de los patrones. En un mercado laboral como este, parece poco probable que los patrones estén dispuestos a pagar en promedio 20-25% más de su salario mensual para afiliarlas al IMSS (% depende del salario) solamente por cumplir la Ley.

Otro punto a considerar y no es por excusar a los patrones por su falta de cumplimiento de la Ley, pero hay que considerar que un número significativo tampoco tiene acceso a servicios de salud (50.7%) y trabaja más de 40 horas semanales, repito, no creo que por ello deban eximirse de dar las prestaciones laborales a su trabajadora del hogar, no obstante los datos pueden ayudarnos a entender la falta de afiliación. Sin embargo el saber que un amplio 90% de los patrones si tiene prestaciones laborales incita a considerar que la renuencia es algo real o bien hay problemas económicos también en esos hogares derivados de la pandemia.

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¿Cuánto cuesta afiliar a mi trabajadora del hogar?

Si una trabajadora del hogar percibe $6,000 mensuales, el patrón habrá de pagar en promedio $1,500 adicional, del cual aproximadamente 10% es cuota obrera y 90% patronal. Es importante mencionar que aún cuando cuentes son servicio doméstico 1 vez a la semana, tienes la misma obligación patronal que los que la tienen de planta. El IMSS adecuó el Programa Piloto para que cada patrón, ya sea por 1, 2, 3, 4, 5 o 6 a la semana pague su parte proporcional de la cuota patronal. Por lo que si alguien te ayuda 1 día a la semana por $300 diarios, habrás de pagar una cuota más o menos equivalente a $300 mensuales. Así que todos los que cuentan con trabajadora del hogar en casa tiene la obligación de darle este derecho laboral.

Posible solución

Ante la pandemia actual, los casos de afiliación al IMSS no han crecido exponencialmente, aún con la probabilidad clara de la necesidad de asistencia médica y/o hospitalaria. Esto nos deja ver la clara renuencia de los patrones a hacerlo, ya sea por imposibilidad económica o deseo de mantener el status quo.

Sin embargo hay datos que nos dejan ver que puede ser que falte cierta conciliación y diálogo entre ambas partes. Si bien los patrones no están dispuestos a pagar una cuarta parte de su salario adicional para darles seguridad social; 7 de cada 10 empleadoras afiliarían a sus trabajadoras si parte de las cuotas las cubren sus empleadas (ENOE, 2019). Actualmente el esquema estipula que la cuota es aproximadamente 90% para el patrón y 10% para la empleada (esto cambia según su salario). De la misma manera las trabajadoras del hogar se inclinan a negociar, 6 de cada 10 trabajadoras del hogar están dispuesta a afiliarse al Instituto Mexicano del Seguro Social, aunque ganen un poco menos por las cuotas mensuales. Otro problema que se ha presentado es que los patrones no están dispuesto a hacer los trámites cada mes. Si bien en un principio las trabajadoras del hogar eran las que iban y pagaban al banco y los patrones hacían los tramites digitales, hubo algunas modificaciones al Programa Piloto que hizó que fuera total obligación del patrón afiliarla. Para ello, recomendamos el uso de la Plataforma Digital Patrón Seguro que te hace todos los trámites y te los domicilia a tu tarjeta de débito/crédito, lo cual te quita la carga burocrática y te ahorra tiempo mientras cumples con ésta y otras obligaciones patronales pues te ofrece también una plataforma de capacitación (protección ante el COVID, profesionalización, etc) y también te apoya con la documentación legal, si es que la necesitas, como fniquito o contrato adaptado a las necesidades del patrón.

Los patrones también tienen beneficios por darles seguridad social, cómo evitar gastos adicionales por accidentes o enfermedad,(35% de los patrones pagan los gastos médicos de sus trabajadoras del hogar); pago de incapacidades, evitar demandas laborales asi como cumplir con el deber ético y moral de ser considerados con las necesidades de salud de sus empleadas y sus familias. Considerando que 90% de los patrones si tiene prestaciones laborales habrían de seguir el ejemplo de sus propios jefes para mejorar ellos como jefes del hogar. Dejo aquí los beneficios que compartió la Comisión de Derechos Humanos de la CDMX para ambas partes.